Las gemas y los chakras
Las piedras que ayudan a equilibrarnosUna forma muy efectiva de utilizar las piedras, es aplicarlas durante 15 minutos sobre los siete principales centros energéticos de nuestro cuerpo, llamados chakras. Los chakras principales están localizados desde la base de la columna vertebral hasta la cabeza. En el plano físico se sincronizan con la energía de puntos del sistema nervioso central (plexo nervioso) y con las glándulas del sistema endocrino.
En el plano de la conciencia, los chakras activan y son influenciados por determinadas emociones y deseos. Los chakras se pueden dañar o perturbar por accidentes traumáticos, shocks, crisis, emociones fuertes, temores, angustias, estados emocionales que desgasten, así como por la acción de sustancias psicoactivas como alcohol, cafeína, drogas, hierbas, etc. Cuando un chakra no está funcionando bien afecta al resto.
Las piedras que ayudan a equilibrarlos son:
- Al primer chakra, vertebral y primario, corresponden piedras rojas, como el rubí, el granate, el coral, etc.
- En el segundo chakra se ponen piedras anaranjadas como el ópalo de fuego, la cornalina o el jaspe anaranjado.
- Al tercer chakra, sobre el plexo solar, se le colocan piedras amarillas, como el topacio o el ámbar.
- El cuarto chakra, el del corazón, requiere piedras verdes como la turmalina, malaquita, esmeralda o jade.
- Encima del quinto chakra, sobre la garganta, se deben poner piedras azules como el zafiro, el lapislázuli, el topacio o la sodalita.
- El tercer ojo, el sexto chakra, guarda afinidad con el índigo y se potencia con la proximidad de la azurita o el zafiro oscuro.
- Sobre la coronilla, cerca del chakra superior, deben ponerse piedras violetas, como la amatista o la fluorita.