De Nápoles a Buenos Aires, llega la movida solidaria del «café pendiente»
Originada en Italia, la acción consiste en dejar pago un café para que luego lo tome una persona sin techo; en la ciudad, La Plata y San Isidro ya hay bares adheridosPor Leonardo Tarifeño | LA NACION
Invitar un café siempre es sinónimo de amistad. Y si se trata de un "café pendiente", la amistad vale doble, porque el gesto hace el bien sin mirar a quién. Nacida en Nápoles, una de las ciudades italianas con mayor desempleo juvenil, esta iniciativa solidaria llega a la ciudad y desembarca con la sencillez de los pequeños grandes actos: quien toma un café deja otro pago (el "pendiente") y luego cualquier persona sin techo puede pedirlo, como inesperado abrigo para estos días de frío.
El "café pendiente" no cambiará el mundo, pero sin dudas lo hará un poco más habitable para unas cuantas personas. De pronto, quien no tiene absolutamente nada se encuentra con la posibilidad de entibiar su cuerpo, comer algo (los bares que forman parte del proyecto pueden acompañar el café con cualquiera de sus productos a la venta) y abandonar, aunque sea por un instante, la cruel marginalidad de su vida cotidiana. A unos la invitación les cuesta muy poco; a otros les representa mucho. El proyecto es tan simple y valioso que ya se impuso en Italia, España, México, Uruguay y, ahora, en lugares tan distantes de la Argentina como Salta, Rosario, Alta Gracia o Buenos Aires.
Aquí comenzó gracias a la curiosidad de la diseñadora Sol Verdier, quien tras descubrir la versión italiana en Facebook armó una página web ( www.uncafependiente.com.ar ) y difundió los principios a través de una fan page ( www.facebook.com/cafependiente ). Luego les contó su sueño a algunas amigas, la mayoría propietarias de bares, a quienes terminó de convencer cuando la fan page creció a un promedio de mil fans diarios. Y finalmente la rueda comenzó a rodar. "Sol vivía enfrente, venía a comer aquí y un día nos explicó qué se traía entre manos -cuenta Paula Comparatore, dueña de La Perichona, el bar de la Casa Museo del Virrey Liniers, en San Telmo-. ¡Entre su pasión y la sencillez de la idea nos resultó imposible no sumarnos! Nosotros, con el café también regalamos dulces o algo del menú. Y nos alegra que cada día haya más bares y restaurantes en la red de adheridos."
Guapa (Paunero 2751), la Pastelería Soffice (Martín y Omar 242, San Isidro) y La Perichona fueron algunos de los primeros lugares en participar de la iniciativa, que de acuerdo con Comparatore encuentra más obstáculos en hacer visible esta ayuda entre quienes la necesitan que en sumar dueños de bares dispuestos a formar parte de la movida. "Entre todos recorremos los distintos barrios para contar de qué se trata todo esto, pero no es sencillo -señala-. Por suerte, hay mucha gente preocupada por el desamparo de quienes viven en la calle, y todos los que trabajamos en gastronomía sabemos que siempre hay familias enteras a la espera de un poco de comida cuando se baja la cortina. Yo también soy dueña de El Federal, en San Martín y Marcelo T. de Alvear, y allí les doy de comer a unas 10 o 15 personas sin techo al final de cada día. El café pendiente es otra manera de ayudar y, además, de crear conciencia y crear lazos entre los que tienen algo y los que no tienen nada."
Para saber en qué lugares se puede dejar un café pago, conviene visitar los links del proyecto o, directamente, entrar en contacto con Verdier en cafependiente@hotmail.com. Y fuera de la Red, en las calles donde el frío se mete entre las piernas y estruja la piel, alcanza con buscar una calcomanía en la que el humo que surge de un pocillo se convierte en un corazón. Un corazón grande como un escudo, capaz de transformar estos días de invierno prematuro en el paraíso incipiente de la solidaridad.
También en el resto del país
El "café pendiente" sumó a Buenos Aires y ya se extiende a distintos puntos del país, como Salta, Rosario y Alta Gracia.En el caso de la capital salteña, el Ejecutivo municipal lo apoya a través de una resolución del Concejo Deliberante que destaca "el gesto generoso, sencillo y de bajo costo, que invita a todos los que deseen tener una actitud solidaria".