Qué moldes de repostería usar para cada receta
Si te gustan los postres y agasajar a tus seres queridos con las recetas más ricas, entonces los moldes de repostería son tan importantes como los ingredientes y el paso a paso.
Según la receta y sus ingredientes, los moldes de repostería que tengas que usar. No sólo por la forma y el tamaño, sino por cómo es su cocción. Esto hará que el postre final quede perfecto y todos lo disfruten viendo y comiendo.
Moldes según la cocción
Cada torta o postre lleva su cocción. Algunos necesitan mucho tiempo de horno, otros no tanto. Otros necesitan por el contrario frío. Por eso, los materiales, tamaños y formas son tan variados. ¿Cuál será el más indicado para tu receta?
Moldes para horno y sus formas
La gran mayoría de las tortas y bizcochuelos necesitan su paso por el horno. En este caso, hay varias opciones, y para cada receta hay una mejor alternativa que otra. La mayoría de los moldes están pensados para resistir el calor, pero puede que ciertas recetas necesiten otros detalles.
Los circulares son los más clásicos. Los más altos están pensados para bizcochuelos, mientras que los más chatos para las tartas. Esto es debido a la masa y como leuda.
Los rectangulares son perfectos para mezclas con poca levadura. En este caso suelen ser de acero inoxidable porque distribuye mejor el calor. También se pueden encontrar de vidrio, pero puede que el resultado no sea tan esponjoso.
Los moldes cuadrados se usan para preparaciones en capas, como por ejemplo el milhojas. También se utiliza mucho para hacer brownie, ya que permite una capa superior crujiente y el resto suave.
Moldes desmontables
Los moldes de repostería desmontables tienen distintas formas y son perfectos para principiantes o preparaciones quebradizas (suelen contener algún producto lácteo).
Los cheesecake o tortas de ricota son recetas ideales para realizar en este tipo de moldes que suelen ser de acero inoxidable, aunque también se puede encontrar en silicona.
Moldes para suflés
También vas a poder encontrar moldes de repostería específicos para estos postres. No solo contienen una bandeja honda en la que se agrega agua para su cocción, sino que además cuenta con el molde circular para la preparación.
Moldes para pan
El pan es muy especial. Requiere otro tipo de cocción. Si querés hacer pan en tu casa, hoy en día existen moldes con tapa. Esto es perfecto para poder crear una corteza crujiente y un relleno esponjoso, ya que distribuye el calor, el aire y la humedad de otra forma.
Postre frío
Los moldes de repostería para estas preparaciones suelen ser de vidrio y silicona. En el caso del vidrio, pueden ser de forma rectangular o cuadrada para helados o preparaciones en capas. Los de silicona están pensados para preparaciones que necesitan ser desmontadas, como trufas y bombones.
Los recipientes de aluminio y acero no se recomiendan para postres fríos ya que en la heladera la preparación puede tomar gusto óxido y además almacenar bacterias de todo tipo.
Piezas de decoración
Todo pastelero o audaz en la cocina se anima a las piezas decorativas en sus recetas de repostería. Para esto también hay moldes especiales.
La silicona es una gran aliada para estos casos. Como ya hemos visto, son fáciles de desmontar y vienen en una gran cantidad de formas y tamaños. Otro elemento que no puede faltar es la rejilla para colocar por debajo en caso de querer hacer baños o salpicaduras de chocolates y salsa.
Ya estás en perfectas condiciones de iniciarte en este bello mundo y elegir la receta perfecta para sorprender a tus seres queridos. Con los moldes de repostería indicados, tus preparaciones llegarán a otro nivel.
