La vuelta a la rutina: época de exámenes
Natalia Barrera, decodificadora de emociones y creadora del método Alquimia Femenina, brinda algunos consejos a tener en cuenta por niños y padres para el momento de rendir exámenes.Llega la época en que algunos niños y adolescentes deben materias y tienen que rendir exámenes. Hay nervios, cansancio, irritación, mal humor porque de los resultados de estos exámenes depende su año lectivo ya sea para pasar de grado o año como para entrar a la facultad. Muchas veces frente a un examen, los nervios y el estrés pueden jugar en contra perdiendo el enfoque y olvidando todo lo que se ha estudiado. Aparecen pensamientos negativos, la persona cree que no va a poder, o que le va a ir mal y esto lo paraliza al momento de rendir. Puede que la mirada del maestro o la de sus padres, demasiados severos y exigentes, también lo paralicen sintiéndose incapaz de cumplir con las expectativas. Para calmar las aguas, se brindan algunos consejos a tener en cuenta por alumnos y padres al momento de rendir exámenes.
Consejos para el alumno:
- Para evitar los nervios previos a los exámenes, lo mejor es sentirse seguro y para eso es esencial dar el 100%, no se puede pretender aprobar un examen si no se ha estudiado.
- Lo ideal es prestar atención en clase, aprovechar esas horas para practicar y comprender mejor, de esa manera “estudiar” sería simplemente un repaso, también es bueno estudiar un poco todos los días para no llegar estresados a la fecha del examen.
- Decirnos a nosotros mismos “yo sé esto”, “me es fácil recordar y aprender porque soy muy inteligente”, nuestro diálogo interno es esencial, ya que este nos programa a nivel inconsciente, si nos decimos que “no podemos” nuestra mente se bloquea.
- Al momento de estudiar tener en claro qué tipo de memoria funciona mejor, esto podría facilitarnos la tarea y lograr mejores resultados. Hay personas que son más auditivas: necesitan leer los resúmenes y escucharse para lograr interpretar mejor los conceptos e incorporarlos, otras personas son visuales: realizan gráficos, usan resaltadores, les ayuda a incorporar mejor la información y a la hora de recordar lo que estudiaron visualizan el resumen o el gráfico, y por último hay personas que son sensoriales: necesitan usar otros sentidos, el tacto, el olfato, las emociones, generalmente estas personas buscan incorporar los conocimientos a través de las emociones, imaginar una historia y meterse en el personaje.
Consejos para los padres:
- Los niños aprenden y copian las conductas de los padres, no se le puede pedir a los hijos que les guste estudiar y leer, cuando los padres no tienen el hábito de la lectura. Si queremos que los niños tengan hábitos de responsabilidad y motivación, es esencial que los padres enseñen con el ejemplo más que con las palabras.
- Lo segundo y más importante es generarles seguridad y confianza a los hijos. Si los padres utilizan un lenguaje más positivo a la hora de motivar a los hijos para que aprueben exámenes, los niños se sienten menos exigidos y eso baja muchísimo el estrés, ya que el miedo de los niños es ser regañados por los padres.
- Es primordial establecer la confianza en nuestros hijos. Decirles que van a ir aprobar el examen, no a rendirlo, ya que el mensaje que le damos al inconsciente de nuestros hijos es el de Aprobar, no el de ir a rendir. Ese tipo de expresiones generan seguridad. La mirada de los padres es fundamental para los hijos, la aprobación de los padres les genera mayor seguridad en sí mismos.