Escenarios argentinos para la aventura
Volcanes, desiertos, ríos y montañas son los escenarios ideales para los amantes del turismo aventura. La diversidad de paisajes que ofrece el país permite no sólo el descanso y el relax, sino también la posibilidad de practicar distintos deportes con la naturaleza como marco
Las variantes son infinitas. Los más arriesgados pueden realizar deportes extremos con distintos niveles de dificultades y quienes desean aprender e iniciarse en diversas disciplinas también tienen la posibilidad de hacerlo. El denominador común de todos los destinos de turismo aventura es el impacto visual de los paisajes naturales argentinos y especialmente, la oportunidad de poder capitalizar las posibilidades que ofrecen estos escenarios a sus visitantes. Una de las opciones más innovadoras se encuentra en la provincia de Salta en dónde se realiza , canopy o “Vuelo del Condor“, una travesía aérea que recorre tres kilómetros ubicados por encima del cañadón del río Juramento con una velocidad promedio de 30 kilómetros por hora. Los amantes de la adrenalina y los desafíos extremos encuentran en este recorrido aéreo la mejor oportunidad para disfrutar del paisaje a puro vértigo. Antes de comenzar la travesía los participantes reciben una asesoramiento por parte de los instructores en el cual aprenden el uso apropiado del equipo. Luego, realizan una caminata en dirección al cerro Peñas Blancas, en dónde se encuentran emplazados los cables con una altura de entre 80 y 150 metros. Para los amantes del aire también existen otras posibilidades y destinos. En la provincia de Córdoba se realizan vuelos en parapente y es indicado por los especialistas como el sitio ideal para practicar este deporte. Tal es así que en 1999, la localidad de La Cumbre fue elegida como sede mundial y allí se ha llevado a cabo, en varias oportunidades el campeonato nacional de aladeltismo.
En el agua, en la tierra y en las alturas
Si hay una región que reúne todas las posibilidades para maximizar la práctica del turismo aventura, es la Patagonia. En el sur de la Argentina sus espectaculares paisajes actúan como escenarios ideales para realizar ejercicio físico con la naturaleza como un contexto inmejorable. Una de las actividades más practicadas en el sur es el trecking. Un sitio privilegiado para el ascenso es el glaciar Martial, a unos pocos kilómetros de Ushuaia, en Tierra del Fuego. Desde sus 1050 metros de altura ofrece una vista impactante. Para acceder al Martial, el arribo se realiza a través de aerosillas y luego los más arriesgados cuentan con la posibilidad de realizar trecking sobre hielo.Además de esta propuesta, otra de las posibilidades que ofrece la Patagonia es la tener contacto directo con lobos marinos, ballenas y delfines. Estas especies marinas no sólo pueden avistarse desde una embarcación sino que la ciudad ofrece la posibilidad de bucear. Las inmersiones duran unos 45 minutos y aunque no se encuentra permito tocar a los animales, la experiencia de nadar junto lobos marinos, ballenas y delfines en su hábitat natural es una oportunidad imperdible para los amantes de la fauna y la naturaleza. Para los fanáticos de propuestas arriesgadas y de alto rendimiento físico, el sitio indicado es Neuquén en donde se realiza el ascenso al Volcán Lanín. Para concretar este desafío se deben realizar capacitaciones específicas en esta práctica deportiva y reunir óptimas condiciones físicas ya que llegar a la cumbre implica ascender 3776 metros de altura. La travesía se realiza con guías especializados en montañismo y en el Paso Tromen ubicado al pie de la cara norte del volcán, se encuentra un puesto de Guardaparques en dónde se supervisa el estado de salud de los grupos que realizan el ascenso.
La historia y la aventura en un mismo lugar
En la provincia de Mendoza se puede protagonizar una experiencia tan única como inolvidable. Recreando el contexto histórico en el cuál Don José de San Martín junto a un grupo de 117 expedicionarios enfrentó a las tropas realistas pertenecientes a la Corona española, y convirtió a la Argentina en una Nación, el Cruce de los Andes puede revivirse en pleno siglo XXI. La travesía se realiza a modo de homenaje simbólico al libertador de la patria e invita a los cada uno de los participantes a redescubrir la historia, siguiendo los caminos recorridos por Don José de San Martín. El trayecto se realiza a caballo durante 7 días a través de los límites fronterizos con Chile. Además de conocer y darle un nuevo significado a la identidad nacional, el Cruce de los Andes brinda en su caminar paisajes impactantes como las lagunas escondidas y las termas más espectaculares del país. La Argentina ofrece opciones para todas la edades, posibilidades, condiciones y especialmente, para quienes desean maximizar sus capacidades físicas y mentales en algunos de los paisajes más bellos del mundo.