El futuro del corazón: cómo la tecnología está transformando la prevención y el cuidado cardiovascular
En el Día Mundial del Corazón, especialistas destacan cómo la tecnología está revolucionando la salud cardiovascular. Estudios médicos no invasivos y apps móviles permiten diagnósticos más precisos y una prevención accesible, pero aún queda el desafío de educar a la población para aprovechar mejor estas herramientas.
El 29 de septiembre, Día Mundial del Corazón, es una oportunidad clave para reflexionar sobre los avances en salud cardiovascular y cómo estos pueden mejorar la calidad de vida de millones de personas. En Argentina, las enfermedades cardiovasculares son responsables de más de 100.000 muertes al año, representando la principal causa de fallecimiento en el país. En este contexto, el Dr. Mariano Falconi, Director del Departamento de Posgrado y de la Carrera de Especialización en Cardiología de la Universidad del Hospital Italiano de Buenos Aires, reflexiona acerca de cómo la tecnología es un factor clave en la prevención y tratamiento de estas afecciones.
"Hoy, gracias a estudios diagnósticos no invasivos de alta calidad y precisión, como ecocardiografías, resonancias magnéticas y tomografías, podemos detectar enfermedades en etapas muy tempranas, incluso antes de que aparezcan los síntomas", comenta Falconi. Estos avances permiten que los médicos no sólo diagnostiquen condiciones de manera más precisa, sino también desarrollen tratamientos personalizados para cada paciente, mejorando los resultados a largo plazo. Por otro lado, también permiten descartar la presencia de enfermedad, evitando tratamientos innecesarios y preocupaciones infundadas, e incluso economizando recursos del sistema de salud.
Principales problemas que afectan a la salud cardiovascular de los argentino
Las principales consultas relacionadas con la salud cardiovascular en Argentina suelen centrarse en factores de riesgo como hipertensión arterial, colesterol alto, diabetes, tabaquismo, sobrepeso/obesidad, sedentarismo y estrés. Según el Dr. Falconi, muchas de estas condiciones no presentan síntomas evidentes hasta que están avanzadas, lo que subraya la importancia de realizar chequeos periódicos y tomar medidas preventivas a tiempo.
Apps y wearables: tecnología al alcance de todos
En Argentina, según la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, un 34% de la población adulta tiene hipertensión arterial, y más del 60% de las personas mayores de 18 años presenta sobrepeso u obesidad, factores clave en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, muchas personas desconocen que dispositivos como los smartphones y relojes inteligentes pueden ser herramientas valiosas para controlar estos factores.
"Dispositivos como los teléfonos móviles permiten a las personas contar sus pasos y monitorear su actividad diaria. Caminar 30 minutos al día o alcanzar los 10.000 pasos (a partir de los 4000-5000 pasos ya hay beneficios) es un objetivo simple pero efectivo para reducir el riesgo cardiovascular", explica el Dr. Falconi. “Hay algunas determinaciones más avanzadas, en general disponibles en smartwatches, tales como medidores de frecuencia cardíaca, detección automática de arritmias y saturación de oxígeno, entre otras, que también pueden ayudar a conocer el estado de salud cardiovascular y establecer planes para mejorar estas condiciones”, agrega.
Limitaciones y oportunidades
A pesar de los avances, Falconi advierte que aún queda un largo camino por recorrer. "Si bien estas tecnologías están al alcance de muchos, una gran parte de la población no las utiliza por desconocimiento o desinterés". Además, solo el 20% de los hipertensos en Argentina está correctamente tratado, lo que evidencia la necesidad de mayor conciencia y educación en salud cardiovascular.
“Es importante que las personas incorporen la utilización de estas herramientas orientativas para conocer de manera más objetiva sus parámetros de salud, y para que el profesional disponga de algún dato sobre el cual profundizar luego su investigación”, explica.
Inteligencia Artificial: El futuro del diagnóstico cardiovascular
Otro avance significativo es la integración de inteligencia artificial en la medicina cardiovascular. "La IA promete acelerar los diagnósticos y mejorar la precisión en la evaluación de imágenes cardíacas", afirma Falconi. Aunque todavía se encuentra en sus primeras etapas, la posibilidad de detectar de manera muy precisa aspectos que escapan al ojo o análisis humano, procesar miles de datos en pocos segundos, evaluar imágenes con precisión mayor a la del ser humano y en tiempo récord, entre otras cualidades de esta tecnología, tienen el potencial de cambiar por completo el manejo de las enfermedades del corazón, anticipando problemas antes de que se desarrollen.
En definitiva, el futuro de la medicina cardiovascular trae importantes cambios para los pacientes. Promover la educación en salud del corazón y fomentar el uso consciente de la tecnología es fundamental para reducir el impacto de estas enfermedades y mejorar la calidad de vida de millones de argentinos.