29/08/2016
Paradojas, esas contradicciones que llaman la atención
"En mis viajes por el mundo, pude observar algunas extrañas paradojas".
¿Qué es una paradoja?
A menudo, los filósofos se sirven de las paradojas para revelar la complejidad de la realidad. La paradoja también permite demostrar las limitaciones de las herramientas de la mente humana. Dicho de manera simple, son las contradicciones que se desprenden de decisiones y/o acciones. En este caso, voy a referirme a dos curiosos casos que pude apreciar "en vivo" durante mis viajes.
Paradojas "americanas"
¡Mata pero no bebas!
En los Estados Unidos, a partir de los 18 años y hasta los 42, un ciudadano puede enrolarse en el ejercito. Y luego de capacitarse profesionalmente, convertirse en un soldado "hecho y derecho", con capacidad para pelear y defender a su país tanto en suelo norteamericano como en cualquier otro lugar del mundo, por ejemplo, Irak o Afganistán.
A partir de esa temprana edad (18), esta persona tiene capacidad, llegado el momento y la circunstancia, de matar al enemigo. Pero para poder tomar una cerveza en los EE.UU, necesita tener como mínimo 21 años de edad.
Digo... con 19 años puede usar un arma y matar, pero no puede tomar una cerveza ! Salud !
¡Armas sí! ¿Medicinas?... no sé.
Para un residente en USA, comprar un arma es un trámite muy sencillo. El registro para vender, puede ser otorgado a tiendas de armas, casas de empeño y vendedores individuales.
Antes de la adquisición, el comprador es sometido a un chequeo de antecedentes. Éste es tramitado por el vendedor, presentando una solicitud al Registro Nacional Criminal, y suele durar apenas unos minutos. La venta del arma es negada, entre otros casos, a aquellos que han sido condenados a una pena de prisión de más de un año. Esto no rige sin embargo, en ferias de venta de armas y ventas privadas; allí se puede adquirir un arma sin revisión de antecedentes.
Ahora veamos (y a mí me pasó), lo difícil que es por ejemplo, comprar un medicamento para controlar el colesterol. Se debe ir al médico y si te encuentras en el país como turista, deben hacerte análisis de sangre para comprobar que padeces la enfermedad y luego vendrá finalmente la orden para retirar en la farmacia, exclusivamente las píldoras necesarias para completar el tratamiento hasta que llegues a tu país. Los locales la tienen un poco más fácil, pero no tanto. Definitivamente parece que es más fácil comprar un arma letal que un simple medicamento para tratar una enfermedad crónica.
La "Europaradoja"
En Holanda, es legal el uso y consumo de marihuana, zetas y otras sustancias alucinógenas, en jóvenes mayores de edad. Aunque los menores siempre encuentran a algún mal nacido que se la vende, al igual que las bebidas alcohólicas.
Hay cientos de locales identificados como Coffee Shops, tan populares y abundantes como las cervecerías. Ahora, si se te ocurre entrar a un café normal para tomar un cafecito y le pides al camarero un edulcorante artificial -por ejemplo, porque eres diabético-, en el 80% de los lugares te dirán que no tienen, porque hace mal a la salud!
En un viaje prolongado a Amsterdam, tuve que visitar a un odontólogo. Tenía una infección en una muela, con dolor, hinchazón y todas las de la ley. El tratamiento que me indicó fue no antibiótico. Por el contrario, si me indico analgésicos, antiinflamatorios y buches con agua oxigenada para evitar infecciones. Ante mi pregunta de por qué no me recomendaba antibióticos, el dentista me informó que la ley sólo permite usarlos en caso de máxima necesidad.
Pasé una semana terrible, la infección no cedió, no pude dormir del dolor y recién después de siete días, al regresar a Madrid, finalmente me indicaron la medicación correcta con antibióticos y a las 48 horas, tema superado.
Conclusión: Marihuana de venta libre. Antibióticos para uso concreto y consciente, restringidos. Y también la sacarina !
Paradojas...
Por Omar Romano
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