John Maxwell: El maestro de los líderes que trascienden su tiempo y su obra

Dinamizar y maximizar la trascendencia es el reto y la cualidad que define a un verdadero líder.

Cuando ser jefe era sinónimo de individualismo y autocracia, el liderazgo era propio de quien lo detentaba, y por lo tanto, desaparecía con la persona que detentaba el rol.

En la actualidad, el atributo que define a un líder exitoso y con un legado a largo plazo es la honestidad. Es decir, quien aplica aquello que predica es quien logra trascender su propia biografía y construye equipos de trabajo que inclusive superan la obra de su fundador.

El liderazgo innovador tiene como fuente y origen a un hombre que supo estar un paso adelante de su tiempo. Su nombre es John Maxwell y es uno de los autores y profesionales más prolíficos y efectivos en la misión de crear una ruptura con el modelo tradicional de liderazgo en el mundo.

Autor de más de 80 libros que instan a una nueva ética de liderazgo, Maxwell es best seller en todo el mundo. Y a través de su compañía especializada en liderazgo, entrenó a más de 1 millón de personas. Además, sus conferencias convocan a más de 350 mil asistentes al año.

Maxwell fue precursor en dar a conocer al mundo las claves y las herramientas para ejercer el liderazgo a través de la empatía, la inteligencia emocional, el fortalecimiento de la motivación y la iniciativa; a partir de la credibilidad y la coherencia de un líder; y no sólo por el mero hecho de dar órdenes.

Esperanzas a conciencia

Maxwell es sin dudas un referente global y su misión a favor de la innovación comenzó en la década del ´70. Por aquel entonces tenía 24 años y oficiaba como pastor en el servicio cristiano dentro de la organización Wesley, en los Estados Unidos, cuando una propuesta cambió el curso de su vida.

A Maxwell le ofrecieron la oportunidad de guiar una de las iglesias más importantes de su congregación. Era sin dudas, el proyecto más significativo y espectacular para todo pastor joven. Y rechazar la oferta estaba prácticamente fuera de todo sentido común.

Pero Maxwel no estaba seguro de asumir este rol y decidió buscar ayuda en un entrenador de ejecutivos. “Él me preguntó sobre mi plan personal de crecimiento y yo no tenía ningún plan. El entrenador entonces me dijo: El crecimiento no es un proceso automático. Tú vas a crecer porque tienes la intención de crecer, no por accidente. Así que eso cambió mi vida”, recuerda el autor, quien siempre advierte que la esperanza no es una estrategia, sino que se materializa trabajando.

Ese encuentro con el entrenador de ejecutivos cambió su vida. Finalmente, rechazó la propuesta de continuar su carrera como pastor en una gran iglesia y comenzó a desarrollar su carrera como escritor. Aquella primera experiencia motivó la creación del que sería uno de sus máximos best sellers “Las 21 leyes irrefutables del liderazgo”.

El valor que hace la diferencia en la trayectoria de Maxwell, es la capitalización de sus experiencias, éxitos y sobre todo, sus fracasos en el aprendizaje. El es quien reconoce que los máximos aciertos y evoluciones en su desarrollo personal y profesional se han producido en momentos de dolor o conflicto. “La gente exitosa toma cada experiencia difícil y aprende de ella, sabe administrar sus fracasos. La gente sin éxito, toma la experiencia difícil y la deja. Corren de ella y no aprenden. Así que la repiten una y otra vez”, destaca el autor.

Y ¿cómo enfrentar los fracasos? La respuesta es contundente: con valor y responsabilidad en primera persona, sin excusas o señalamientos hacia terceros. Maxwell recuerda que aprendió esta lección a través del libro “Cómo Piensa Un Hombre” de James Allen, que le regaló su padre cuando tenía sólo 12 años. “Los hombres están ansiosos por mejorar sus circunstancias, pero no están dispuestos a mejorar”, fue la frase que jamás puedo olvidar y hasta el día de hoy lo motiva para inspirar a millones de personas a cambiar su realidad, saber gestionar sus emociones y convertirlas en acciones positivas.

Internacionalizando un liderazgo trascendente

Maxwell es en la actualidad el máximo referente global en liderazgo. A través de EQUIP, su organización internacional de entrenamiento de líderes, su mensaje llega a los 5 continentes a través del asesoramiento a millones de personas al año. Además, la labor de Maxwell no se limita al mundo de los negocios sino que ha aplicado su experiencia en áreas significativas para el cambio positivo a nivel social. En el 2011, fundó “YouthMAX”, un programa que envía entrenadores al interior de las escuelas para discutir con los estudiantes problemas relacionados con el bulling, autoimagen, desarrollo del carácter y la actitud.

En cada una de sus conferencias, seminarios y charlas, Maxwell es consultado sobre una inquietud clave en tiempos en los cuáles la ansiedad por el éxito es el denominador común.

La respuesta es concreta: “La motivación se va, la disciplina te mantiene creciendo”, afirma. Y explica que la piedra fundamental del progreso es pensar a largo plazo. “Las pequeñas disciplinas repetidas consistentemente día a día, conducen a grandes logros ganados poco a poco con el tiempo”, sugiere. Y además propone cambiar el estereotipo clásico en la forma de pensar el planteamiento de las metas: “Enfocar únicamente en metas es temporal, pero concentrarse en el crecimiento es permanente“.

Maxwell rompió el paradigma de la vanidad y el narcisismo propio del liderazgo que busca sólo el reconocimiento y el beneficio propio, para convertirlo en un nuevo estilo de dirección basado en la democratización y sobre todo, en la trascendencia: "Aprenda a ser líder, no sólo a favor de sí mismo, sino también de las personas que vienen detrás de usted. Y cuando llegue a los niveles más altos, no olvide llevar con usted a otros individuos a fin de que estos se conviertan en los líderes del mañana”.

 Síguenos en Facebook
 Síguenos en Instagram